jueves, 17 de diciembre de 2015

Suelta de globos Valencia

El pasado mes de octubre se celebró en Valencia la primera suelta de globos para recordar a bebés fallecidos. Me enteré casi de casualidad pero allí estuvimos mi marido, Hugo y yo.
Fue muy emotivo ver familias recordando sus bebés y todos esos globos volar hacia el cielo para reencontrarse con sus destinatarios.
No éramos demasiadas familias pues, el evento no había tenido mucha propagación pero, estoy segura que el próximo año, nuevas familias acudirán a esta cita tan bonita ya que, desgraciadamente, más bebés morirán o otras familias se enterarán gracias al grupo de Facebook (Grupo de duelo gestacional en Valencia) que decidimos crear para seguir en contacto y ayudarnos unos a otros.
Nuestro globo con unas hermosas palabras para Álex volando por el cielo va.

 

El pasado año, como no hacían nada en Valencia, lo hicimos a distancia en Madrid gracias a la organización de Uma Manita.




3 años ya

Ya hace mucho que no escribo en el Blog pero, esta entrada se la dediqué a Álex el 2 de diciembre en mi Facebook porque cumplía años en el cielo.
La pongo sin traducir:


"3 anyets han passat ja des de que tot allò que havia imaginat amb tu se n'anà amb la rapidessa d'un huracà.

3 anyets que han fet que el dolor menguara però que mai faran que desaparega.
3 anyets de buit, d'incomprensió de molta gent cap al nostre amor però, saps què? Que sempre que puc, parle de tu. Inclus el teu germanet, parla de tu.
Que farem tot el possible per mantindre viu el teu record i que mai, mai, t'oblidaré perquè la felicitat que tu em donares, encara no la he trobat.
Sempre incompleta. Mamà."

martes, 29 de julio de 2014

Reforma Amanda

A través de una página de una red social, llegué a esta web:
http://duelogestacionalyperinatal.com/reforma-amanda/

En ella se habla del deseo de poder inscribir en el Registro Civil y por tanto que aparezcan en el Libro de Familia los bebés fallecidos dentro del vientre de su mamá a partir de los 180 días de gestación. Se pide un cambio en el art 30 del Código Civil.

Personalmente me parece muy bien porque hay que considerarlos como personas que vivieron y murieron. En mi caso por ejemplo, ¿qué diferencia habría entre mi bebé que murió en la semana 39+5 y otro que naciera en la 38 por ejemplo y muriera al día siguiente? En teoría, mi bebé aún vivió más tiempo... Sé que no se puede comparar el que muera dentro o fuera del vientre materno pero me refiero a que mi hijo le tocaba ya nacer. De hecho, mi segundo hijo, nació en la 38+2.

He firmado la petición en www.change.org. Por favor, si lees esto, ayúdanos con tu firma. Este es el enlace:

http://www.change.org/es/peticiones/al-sr-ministro-de-justicia-d-alberto-ruiz-gallard%C3%B3n-queremos-poder-inscribir-a-nuestros-bebes-fallecidos-en-el-registro-civil-y-en-el-libro-de-familia-reforma-amanda
GRACIAS!!!

Si pudiera volver atrás...

Hay días como hoy en los que siento mucha rabia. ¿Por qué tuvo que morir Álex? A veces tengo la sensación de que es como si no hubiera pasado. Recuerdo haber estado embarazada nueve meses, haber tenido un parto, haber visto a mi hijo pero... ¿qué me llevé de ahí? No salí con él en brazos y con la enorme felicidad que se supone que conlleva un parto.

Ojalá pudiera volver atrás en el tiempo. Ojalá hubiéramos detectado arritmias o que algo no iba bien para poder intervenir de inmediato. Lo quiero y no lo tengo conmigo. 

Me da rabia pensar que el resto del mundo lo pueda haber olvidado. Quiero que todos lo tengan en cuenta, que me lo recuerden y no que hagan como si no hubiera existido.

Todavía me caen lágrimas al pensar en él. Al ver a su hermanito hacer miles de cosas y pensar que él jamás las pudo hacer. Jamás nos pudo ver, a sus papás, que tanto lo queríamos y deseábamos darle todo nuestro amor.

¿Por qué tuvo que pasar? 

Si pudiera volver atrás en el tiempo, me gustaría haber estado con él y con mi marido a solas tras el parto. Haber tenido unos minutos de intimidad donde poder despedirnos más tranquilamente ya que en el paritorio había mucha gente y todo pasó muy rápido.  Tan sólo me lo enseñaron y lo miré, pero no lo tuve entre mis brazos porque no dije nada. Me quedé callada. No sé si por el bloqueo de la situación o por los tranquilizantes.

Antes de su entierro estuvimos a solas con él pero...ya no era lo mismo. Además, él ya estaba en su ataúd y no lo podíamos sacar, ni abrazar... y ya estaba completamente helado. Tan helado que hacía más real su muerte. Como me duele recordar esos momentos. Que mal lo pasé y cuantos momentos dolorosos tendré al recordarlo hasta el día de mi muerte que lo cogeré en brazos para siempre.





miércoles, 18 de junio de 2014

Bebés invisibles

Aquí os dejo el link de un bonito vídeo de dos mamás contando su experiencia ante la pérdida de sus bebés.
Porque dar vida es un milagro y no siempre los embarazos acaban bien.

sábado, 14 de junio de 2014

La importancia de los bebés arco iris

Desconocía el término "bebé arco iris" hasta hace poco.

Tras una pérdida, el vacío que queda es enorme. Las ilusiones, los proyectos, las ganas de vivir nuevas experiencias, el amor que no se da... todo hace que, durante un tiempo, no se le vea sentido a nada.

El dolor es tan grande que crees que nada volverá a ser como antes. Y, así es pero, con el tiempo, necesitas volver a intentarlo. Necesitas una nueva razón para sentirte mejor.

Personalmente, he de decir que, mi segundo embarazo fue un infierno porque tuve miedo desde el primer hasta el último día pero, me alegro muchísimo de haberlo hecho tan rápido pues, gracias a Hugo (mi bebé arco iris) tengo alegrías cada día, nuevas ilusiones y afronto la vida de otra manera. 

Sin él, seguiría con la tristeza en mi rostro. No es que ahora no piense en Álex. Jamás dejaré de hacerlo. Pero la pena se hace más llevadera.

Hugo es lo más bonito que tengo. Con una mirada suya se me van todos los males y, aunque tenga ahora lágrimas en los ojos porque todo lo que él me hace sentir es maravilloso y con Álex no lo pude vivir, me hace feliz.

Cuando sea mayor le contaré todo: que tiene un hermanito en el cielo que cuida de todos nosotros, que él trajo la alegría a casa en un momento muy duro de nuestras vidas... y que, si no fuera por él, a saber que hubiera sido de nuestras ellas.

Gracias por existir Hugo.


(Imagen tomada de la página de Facebook de "Mirar al cielo")

viernes, 9 de mayo de 2014

No te rindas

No te rindas, aún estás a tiempo
De alcanzar y comenzar de nuevo,
Aceptar tus sombras,
Enterrar tus miedos,
Liberar el lastre,
Retomar el vuelo.
No te rindas que la vida es eso,
Continuar el viaje,
Perseguir tus sueños,
Destrabar el tiempo,
Correr los escombros,
Y destapar el cielo.

No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se esconda,
Y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma
Aún hay vida en tus sueños.

Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo
Porque lo has querido y porque te quiero
Porque existe el vino y el amor, es cierto.
Porque no hay heridas que no cure el tiempo.

Abrir las puertas,
Quitar los cerrojos,
Abandonar las murallas que te protegieron,
Vivir la vida y aceptar el reto,
Recuperar la risa,
Ensayar un canto,
Bajar la guardia y extender las manos
Desplegar las alas
E intentar de nuevo,
Celebrar la vida y retomar los cielos.

No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se ponga y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma,
Aún hay vida en tus sueños

Porque cada día es un comienzo nuevo,
Porque esta es la hora y el mejor momento.
Porque no estás solo, porque yo te quiero.

Mario Benedetti

martes, 29 de abril de 2014

Siempre conmigo

Yo nunca he sido de tatuajes pero, desde que murió Álex, se me puso la idea en la cabeza. Me esperé un año, por miedo a que me pudiera arrepentir y, tras nacer mi segundo hijo, como seguía sintiendo ese deseo, me lo hice.

martes, 22 de abril de 2014

Sigo soñando con él

Aunque pase el tiempo, sigo teniendo pesadillas. Revivo una y otra vez su muerte. A veces tal cual pasó,  otras de forma diferente pero,  el final siempre el mismo: muere.

Lloro tanto en mis sueños... Son tan reales... El dolor es tan grande... ¿Cuándo pararán estas pesadillas? ¿Algún día soñaré con él sin sufrir?

Por lo que veo, en el día a día,  el tiempo calma el dolor pero éste jamás desaparece y se pone de manifiesto en el subconsciente, mientras duermo . Ha pasado un año,  cuatro meses y veinte días pero sigo sintiendo dolor y pena por no tener a mi pequeño.

Pensaba que cuando tuviera a mi segundo hijo, Hugo,  los sentimientos cambiarían porque lo quiero con locura y desde que él nació estoy mucho mejor y tengo alegrías cada día  pero, sigo sintiéndome mal cuando pienso en Álex,  que es cada día.  Sigo mirando a los niños que tienen la edad que él tendría con nostalgia. Siempre tendré esa espina clavada. Ese amor que no pude dar.  Esas ilusiones perdidas y un sinfín de sentimientos malos, llenos de dolor.

Nunca pensé que me pudiera afectar tanto. Al fin y al cabo, no nació vivo pero...esos nueve meses dentro de mi, fueron suficientes para quererlo para toda la vida. Porque mientras  él vivía yo era muy feliz y desde que murió,  creo que no lo he vuelto a ser al 100%. Una parte de mi murió con él. Puedo reir por fuera mientras lloro por dentro. Puedo tener más hijos y ser feliz con ellos pero,  siempre pensaré en él,  en lo que pudo haber sido y no fue.

martes, 15 de abril de 2014

La muerte se impone

Así es, día tras día podemos comprobar como la muerte deja su huella. 

Familias enteras quedan destrozadas por la marcha de ese ser querido. Una marcha a veces previsible, otras repentina. Dolorosa igualmente.

Cuando le toca al prójimo sentimos lástima pero, cuando nos atañe... ¿qué sentimos? Yo desgraciadamente perdí a mi padre el 10 de septiembre de 2012 de forma inesperada. En tres días se fue tras una vida llena de salud y lo peor de todo es que se fue por una sucesión de malas actuaciones médicas. 

Ese hecho me dejó paralizada. Algo que yo jamás iba a imaginar que pasara en ese momento. Lo recuerdo todo perfectamente. Cómo sucedió, todos los detalles de esos 3 días,  conversaciones enteras e incluso la ropa que llevaba. Es increíble como la mente humana guarda esa serie de datos,  algunos innecesarios, para crear la historia de lo sucedido.

Un shock. Como ya he dicho, algo que oía,  pero no pensaba que le iba a pasar a mi padre. De repente, tras una vida llena de trabajo, cuando más estaba disfrutando, dejó de existir. 

En este caso, la muerte se impuso. Sin temerla en ningún momento,  sin verla venir. Vino.

Con ese dolor tan grande, con ese vacío, tenía un motivo de alegría y es que llevaba dentro de mi a Álex. Estaba embarazada de 6 meses y medio. Él me hizo afrontar su pérdida de otra manera. 

Pero, la muerte se impuso de nuevo. Esta vez se llevó a Álex. Madita muerte, que me quitó en tres meses a mi padre y a mi hijo. ¿Por qué? ¿Tan mal se había portado mi familia para tener esos castigos? ¿No se supone que si eres bueno recoges cosas buenas? pues no... está claro que no. La muerte llega a todos. Buenos y malos.

Esto pone de manifiesto lo que todos decimos en estas ocasiones pero se nos olvida en el día a día.  Que tenemos que aprovechar cada momento,  vivir intensamente e intentar ser feliz porque todos tenemos un final y no sabemos cuando llegará. 

Es muy triste pensar que puedan morir las personas que quieres o que incluso tú mismo puedas morir; pero así es.  Vivimos para sufrir la pérdida de quienes amamos. 

La pregunta es ¿Si yo muriera hoy, estaría orgullosa de lo hecho en vida? ¿Moriría en paz? Una cosa tengo clara, espero no morir todavía pero, cuando llegue el momento, no estaré sola. En la Tierra dejaré mucha gente que me ama y en el Cielo estarán mi hijo y mi padre para recibirme.

Mientras tanto, seguiré viviendo, intentando ser feliz con lo que tengo y asumiendo lo que me falta.